martes, 16 de agosto de 2011

LA REELECCION

LA REELECCION, UN CAPRICHO DEL PODER
EL PUEBLO LOS REPUDIA, LA HISTORIA LOS JUZGA
ING. HERIBERTO ROBLES ROSALES

MEXICO, un país que ya conoció las reelecciones, y que hoy por un capricho de quienes detentan el poder ya se habla de reelecciones, de Presidentes municipales, de diputados locales, de diputados federales, de senadores y porque no de gobernadores, como dicen en el rancho DESPACITO PARA QUE NO LES DUELA, y al rato tendremos presidente de la república, reelecto porque el pueblo los quiere mucho, porque el pueblo los ama, porque sin ellos la PATRIA se pierde, nada más falso y mentiroso, las misma mañas, las mismas caras, hasta las bonitas aburren.

ALEGRES LOS DIOSES QUE SE FUERON
Corrían los lejanos años de 1964, siendo apenas un niño, pregunté al abuelo, “abuelo si el presidente de la república es tan bueno, y el presidente municipal a quien todos quieren en Múzquiz, porque no se quedan ellos en el poder” el viejo volteo a verme y sonrió al ver en mi cara infantil aquella pregunta a todas luces infantil.
El presidente de la República de aquel entonces lo era el Lic. Adolfo López Mateos, y el presidente municipal en Múzquiz, era Don Julio Galán de la Peña, los dos eran muy buenos gobernantes, el pueblo los quería, el Lic. López Mateos, había iniciado con los libros de texto gratuitos, y con aquellos famosos desayunos escolares que tan bien recibidos habían sido por la clase humilde a la que sin duda nosotros pertenecíamos.
Mientras que Don Julio Galán de le Peña, se hizo famoso por su filantropía y en el caso de los niños por aquellos regalos navideños que le hacia a las clases necesitadas.
Esperando la respuesta a mi pregunta, el abuelo, me acarició mi cabellera y me dijo “siéntate mijo, te voy a platicar, porque los viejos no queremos que ellos se queden, mira en la Patria hay mucha gente que merece ocupar los puestos que ellos tienen ahora, algunos serán buenos, otros malos, pero no es bueno tener a una sola persona que se quede en el poder, porque entonces, el sacrificio de los hombres que murieron en la Revolución Mexicana, habrá sido en vano, y su recuerdo sería manchado por aquellos hombres que violen el sagrado mandamiento de la NO REELECCION, y a lo mejor al paso del tiempo ellos que son buenos ahorita se hagan malos mañana, mira mi padre, se fue a la revolución porque en aquellos tiempos, los hombres que subían al poder, al principio eran buenos, pero luego el poder los cambio y los hizo malos, tan malos que después nomas ellos querían ser, y de las cosas buenas que habían hecho se les olvido y ya sólo pensaron en su grupito de amigos y no permitían que nadie mas que ellos ocuparan la silla.
Y la sangre derramada por nuestros padres y hermanos, de nada habrá servido, por eso mijo no es bueno que se queden, acuérdate que LO QUE HOY AMAMOS, MAÑANA LO PODEMOS ODIAR, y olvidarnos de las cosas buena que hicieron, y así algún día te acordarás de que tuvimos un buen presidente de la República y de un buen presidente Municipal, y las cosas buenas que ellos hicieron no las olvidaras”
Cuanta razón tenia el viejo, a lo mejor era una sabiduría pueblerina pero recuerdo que sus palabras las había pronunciado con el corazón, y hoy que escucho hablar de reelección me pregunto “SE HABRAN OLVIDADO DE MADERO, DE CARRANZA Y LOS HOMBRES QUE MURIERON POR LA NO REELECCION”, que quienes piden la reelección son buenos a lo mejor si, que son malos la historia se los dirá, pero de que existen mejores hombres que ellos, nadie jamás lo dudará, y que no pueden quitar la oportunidad a jóvenes valiosos, sería un crimen hacerlo.
Pero en fin como, los que tienen el poder son los que mandan, habremos de ver si aguantamos las mismas caras, muchos años. Hasta que salga un nuevo Madero he inicie una nueva revolución.
EL ÚLTIMO FRAUDE
Hoy, se habla de la obra de gobierno del Gral. Porfirio Díaz, de que si era un estadista, de que si México creció bajo su mandato, de que si la Patria agradecida debería de traer sus restos mortales para ser homenajeado, cuantas y cuantas cosas se dicen y se escriben sobre el Gral. Díaz, de que fue un Héroe en la Guerra contra Francia, de que fue un soldado Republicano, ni quien lo dude, que fue un visionario también lo fue, entonces cual fue su error.
El Diario del primero de diciembre de 1910, informó que ese día protestaban ante el Congreso, para un nuevo sexenio, el General Porfirio Díaz como presidente de la república, y Don Ramón Corral como vicepresidente, aparecían en el diario las fotografías de ambos personajes y en medio de ellos la foto de Don Manuel Flores, presidente de la cámara.
La ceremonia se celebró a las diez horas en el Palacio de Minería y posteriormente la recepción y felicitación en Palacio Nacional y en Gobernación.
Los sueños de grandeza se habían apoderado de quienes ostentaban el poder, y no era posible dejarlo, y una camarilla de corifeos les aplaudía a morir, creían que el pueblo los amaba, como años antes, nada más falso, dicen que no hay peor ciego que el que no quiere ver, la verdad era otra muy diferente.
Para ese día ya todo el norte del país estaba sembrado de revolucionarios que tomaban pueblos y ciudades, destruían las vías del ferrocarril, el norte entero se estremecía, Don Abraham González, Pascual Orozco y Francisco Villa, en Chihuahua eran los jefes de una incipiente revolución.
Mientras que en San Antonio Texas, el Coahuilense Francisco I. Madero se aprestaba para llegar a México y ponerse al frente de los sublevados.
Así era como un pueblo cansado de ver las mismas caras, se rebelaba en contra de quien cuando empezó a gobernar, era querido, el amor al poder lo transformó y se hizo odioso a los habitantes de una nación amante de la libertad.
MORIR JOVEN
Sin duda uno de los hombres que mas pasiones despierta en la historia Mexicana, lo fue Don Antonio López de Santa Anna, en una de tantas memorias, escribe, que si el hubiera tenido la oportunidad de morir joven y en combate sería considerado el Padre de la Patria, ya que fue el quien en 1829, derrotó al ejercito Español que venia a reconquistar a México, al mando de Isidro Barradas, que desembarcado en cabo Rojo, al sur de Tampico, al mando de 3 100 hombres perfectamente bien pertrechados, tratarían de reconquistar una patria que no dejaba de convulsionarse por golpes militares, cambios de gobierno, dos partidos que aunque su propósito era bueno no lograban ponerse de acuerdo, y es precisamente las tropas Mexicanas al mando de Santa Anna, las que los habrían de derrotar alejando así y para siempre el fantasma de la reconquista española, sin embargo como lo dice el propio Santa Anna, no murió joven y si lo hizo participar en política desde los años 1833 a 1855, lo narra la historia participando en golpes militares, luchas internas, tropiezos económicos, y hasta la pérdida de mas de la mitad de el territorio Mexicano, y no llego a ser el Padre de la Patria y si un sátrapa traidor, que se quiso perpetuar en el poder.
Finalmente la historia también nos hace mención de otro hombre que nos legó una lección de civismo y amor a México. Don Juan Álvarez, que cuando se retira de la Presidencia de la República a donde llegó después de la revolución de Ayutla, exclamó POBRE ENTRE A LA PRESIDENCIA Y POBRE SALGO DE ELLA, PERO CON LA SATISFACCION QUE NO PESA SOBRE MI LA CENSURA PUBLICA, PORQUE DEDICADO DESDE MI MAS TIERNA
EDAD AL TRABAJO PERSONAL, SE MANEJAR EL ARADO PARA SOSTENER A MI FAMILIA, SIN NECESIDAD DE LOS PUESTOS PUBLICOS, DONDE OTROS SE ENRIQUECEN CON ULTRAJE DE LA ORFANDAD Y MISERIA.

heribertorobles52@live.com
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